En un contexto de sobrecarga informativa, donde los estímulos digitales compiten por cada segundo de atención, la conexión auténtica emerge como un bien escaso. La hiperexposición se ha vuelto norma: millones de mensajes, formatos y plataformas intentan alcanzar a las audiencias a toda hora. Sin embargo, en medio de esta avalancha, lo que verdaderamente se…
