Danone anunció recientemente el lanzamiento del primer envase de Villavicencio realizado 100% de plástico reciclado (RPET). Este hito refuerza su compromiso con el triple impacto y consolida el camino que viene recorriendo a través del programa de reciclaje inclusivo con el objetivo de recuperar para el 2023 el 100% del plástico (PET) equivalente a todo el portafolio de la marca.
Según cuenta Diego Páramos, Director de Marketing de Aguas Danone, para hacer posible este proyecto, “estuvimos trabajando durante los últimos dos años junto a un equipo integral e interdisciplinario. Esta botella hecha 100% por otras botellas es un hito porque nos convierte en la primera empresa en Argentina en desarrollar un envase con estas características en la categoría de aguas”.
Además, agrega, “es la conclusión de un trabajo que venimos realizando en alianza con la Fundación Avina desde 2011 a través de nuestro programa de reciclaje inclusivo que busca reconocer el trabajo de los recuperadores urbanos, fortalecer el ecosistema de reciclaje, profesionalizarlo y reconocer el rol de las cooperativas (actores clave en el circuito de reciclaje) con el objetivo de incrementar las tasas de reciclado en el país”.
Villavicencio tiene un propósito muy marcado vinculado a preservar y conservar la naturaleza. “En 2017 con el negocio de Aguas Danone conseguimos la certificación como empresa B para poner de manifiesto que somos un negocio guiado por el triple impacto: social, medioambiental y económico; y es desde ahí que trabajamos todos los días en todo lo que hacemos”, destaca el vocero.
La circularidad como meta
Hoy los consumidores son cada vez más conscientes y exigen información sobre ese producto que deciden poner en la mesa. A través de esta novedad, la empresa ha logrado materializar su propósito como compañía y llegar a los hogares de todo el país.
Según explica Páramos, este lanzamiento, “les permite llegar a la mesa de los argentinos –como lo hacemos hace más de 100 años – con una botella que tiene una gran historia por detrás que refleja el trabajo en conjunto con los recuperadores urbanos y la Fundación Avina”.
En Danone, sigue, “escuchamos constantemente las necesidades de los consumidores y nos adaptamos a sus demandas innovando y adaptando nuestro portafolio. Trabajamos fuertemente día a día para ofrecer productos de máxima calidad que brinden salud a través de la alimentación, la hidratación y la nutrición a la mayor cantidad de personas posibles cuidando también el planeta”.
Villavicencio tiene que ver con cuidar y preservar el medioambiente. Por eso, asegura el directivo de marketing, “trabajamos desde hace más de 10 años promoviendo iniciativas ambientales y sociales que garanticen este objetivo. La circularidad de nuestros empaques es una de ellas, con el desarrollo de envases sustentables. Es en este marco que nos planteamos este desafío dos años atrás y hoy estamos materializando a través de esta botella”.
De cara al futuro la marca quiere involucrar a la mayor cantidad de actores posible, generando campañas de concientización hacia los consumidores para que se puedan incrementar cada vez más las tasas de reciclado en el país. “Somos conscientes de que hemos dado un gran paso y queremos seguir trabajando en esta línea, comprometidos con la salud de la población argentina y el cuidado del planeta”, concluye Páramos.