La experiencia del cliente (CX) siempre ha tenido un fuerte componente emocional. Un cliente satisfecho o molesto muchas veces depende de cómo lo hicimos sentir en cada interacción. Con la irrupción de la inteligencia artificial y la automatización en esos puntos de contacto, nos enfrentamos a una gran pregunta: ¿Puede la IA entender (e incluso…
