En el marco de MMA Innovate Latam 2021, Conrado Wittstatt, Gerente General de Audi y Ducati Argentina, y Patricia Jebsen, General Manager de Beat Argentina, compartieron su visión sobre las tendencias, globales y locales, en movilidad. En este espacio analizaron también cómo ha ido evolucionando el comportamiento del consumidor, qué rol pasan a tener las marcas en estos nuevos paradigmas y cómo la innovación gana protagonismo de cara a la movilidad del futuro.
En cuanto a lo que está sucediendo a nivel global en la industria, “hay una tendencia que no nos debiera escapar a ninguno de nosotros que es la descarbonización”, decía Wittstatt. “De la mano de la descarbonización global vienen un montón de condimentos que nosotros, como parte de una industria, nos toca hacer desde la génesis, desde nuestras fábricas. Entonces, tenemos que trabajar fuertemente en reducir nuestras emisiones contaminantes en nuestras plantas, ser neutrales en emisiones y lo mismo hacemos con los productos que fabricamos. Vamos hacia la electromovilidad. Si bien tenemos hoy en día muchas variantes de energía motrices para los autos, claramente hoy está establecida la energía eléctrica como el modelo a seguir en términos de energía limpia”.
“La conciencia por el medio ambiente es algo que empieza incipientemente, pero aún no hacemos nada”, seguía el ejecutivo. “En este sentido, creo que sí empieza a haber un poco de conciencia en ese camino, siempre apalancado por políticas gubernamentales. Esto lo vemos en los principales países que podemos tomar como ejemplo, donde proliferan autos eléctricos en grandes cantidades, sobre todo los países nórdicos y europeos. Esto no es una casualidad, es producto de que las políticas gubernamentales fomentan de manera muy fuerte el consumo de este tipo de productos. Uno dice “esto lo tienen que hacer los gobiernos”. No. Las personas desde nuestras actitudes influenciamos al gobierno”.
Por otro lado, están la digitalización y la comunicación que también son factores que crecieron enormemente. “Cuando hablamos dentro del auto, hablamos de conectividad. El usuario cada vez más pretende que los autos estén conectados, que nos subamos al auto y rápidamente reconozca nuestro teléfono, como mínimo. Esto es una película que recién arranca y termina nadie sabe dónde, la tecnología no tiene límites”, expresaba Conrado. “La industria automotriz es una categoría de productos de alta retroinversión en los productos que genera. Por ejemplo, todo lo que es la tecnología del software, cada vez está más involucrada dentro de la industria automotriz, en nuestra compañía hemos generado una compañía in house exclusivamente para desarrollar software porque de esa manera podemos tener más agilidad para desarrollar los softwares de nuestros autos y que en un futuro muy pronto la interacción con el auto sea de un alcance mayor al que hoy tenemos”.
A nivel local, planteaba el vocero de Audi, “uno de los principales puntos donde vemos una aceleración es en todo lo que hace a la digitalización y la comunicación digital en lo que es el proceso de compra. Hoy ese proceso es absolutamente digital, desde el inicio, la búsqueda de información, detalles de los productos que comercializamos, hasta tomar contacto con el concesionario. Lamentablemente en Argentina tenemos muchas trabas todavía para este tipo de cosas, con lo cual siempre tenes que terminar sentado en un escritorio llenando papeles. Lo que es seguro es que en no mucho tiempo lograremos digitalizar toda esa parte también”.
Nuevos hábitos
Por su parte, Jebsen hacía un recorrido por los nuevos hábitos y comportamientos que han ido surgiendo, sobre todo, potenciados por el contexto que nos ha tocado vivir. “Lo que fuimos viendo es que fueron cambiando los hábitos de transporte, pasamos de no movernos para nada en transporte público porque no podíamos y empezamos a usar mucho más otro tipo de transportes, como son las aplicaciones, por ejemplo, que seguían circulando. Además, el día que vamos a la oficina lo pensamos un poco más. Antes nos levantábamos todas las mañanas y salíamos, y esa salida era automática, pero ahora es todo más planificado”.
Según la ejecutiva, es importante ir viendo estas tendencias para cualquier cosa que se venda. “Si están en un supermercado, si venden consumo masivo, para todo es importante entender cómo nuestros clientes se acercan a nuestros productos. En la pandemia lo que vimos es que explotaron todos los temas que tenían que ver con la industria del ecommerce. Empezamos a ver que la gente usaba Beat para trasladar cosas porque las empresas de logística estaban abocadas 100% a las grandes cadenas, a los retails o supermercados. Empezamos a ver que también cambiaron los hábitos de a qué proveedores usábamos. También cambiaron las formas de uso. Antes lo usábamos mucho más para trabajar porque íbamos todos los días, ahora se usa mucho más para salir o para hacer otro tipo de actividades”.
Por dónde pasará la innovación
“Cuando llegamos a Argentina se suponía que íbamos a tener un solo servicio que era el traslado de pasajeros”, cuenta Patricia. “De un día al otro nos quedamos todos en casa y no teníamos industria. Lo primero que hicimos fue no apagar la aplicación porque mucha gente esencial se tenía que trasladar y nuestros conductores necesitaban trabajo, el 80% de los conductores viven de esto. Una de las cosas que nos dimos cuenta fue que la gente empezaba a hacer envíos sin tener el servicio asique lanzamos envíos, empezaron a pedirnos servicios de motos asique lanzamos motos, empezaron a pedirnos envíos más baratos y lanzamos Lite. Nos fuimos adaptando todo el tiempo. Lo que nos hizo la cuarentena fue lanzar un montón de servicios que no hubiéramos pensado salir nunca”.
Según Jebsen, muchas veces primero empieza la industria y después se regulariza la situación. “La realidad es que en un montón de países del mundo está regulada nuestra actividad, pero en Latinoamérica ninguno casi, solamente México DF, el resto no. Esto tiene que ver con que el consumidor primero pide las cosas, después las empiezan a aceptar y los gobiernos a veces tardan más tiempo. Eso no significa que no nos sentamos desde el día uno a hablar con los gobiernos ni que estamos esperando que las cosas sucedan. El consumidor siempre va más rápido que las empresas y más rápido que los gobiernos. La globalización hizo que los consumidores hoy tengan acceso a todo, pueden saber de todo y de todas las marcas, están a un click de distancia de todos nuestros servicios y productos. Las empresas tenemos que correr más rápido y los gobiernos también”.
En sintonía, agregaba Conrado, “creo que las grandes corporaciones tienen una obligación de actuar en ese sentido, son las que tienen gran concentración de capital, conocimiento y aplicación de tecnología. Nosotros en Argentina hacemos nuestro aporte desde el momento que ya estamos comercializando autos eléctricos en el país, ya tenemos nuestra organización comercial preparada para este tipo de tecnología. Prepararse significa aprender prácticamente todo de cero porque desde el punto de vista técnico los autos son muy diferentes, las plantas motrices son totalmente nuevas, necesitamos entrenar al personal técnico y todo implica inversiones importantes. Estamos promoviendo, junto con una empresa de alta tecnología como es Siemens, la provisión de cargadores de uso hogareño para nuestros clientes para que puedan armar su propia infraestructura. Los autos hoy tienen autonomía de 400 kilómetros, por lo que con una carga nocturna alcanza para el uso cotidiano. Ahí tenes un cambio de hábito que va a llevar al consumidor de un auto a pensar en esa movilidad, que en nuestro caso le decimos Premium, y tenerla incorporada como tenemos nuestros teléfonos hoy en día”.
“Hay que ir un paso atrás y pensar qué quieren nuestros clientes. ¿Qué es lo que quieren los consumidores? ¿qué pasó en esta cuarentena que aceleró un montón de cosas que ya sucedían en el mundo? La pandemia aceleró un montón de cosas que tienen que ver con la movilidad, pero también demostró las falencias que teníamos en el transporte público en Buenos Aires”, complementaba la vocera de Beat. “A mí me gustaría ver la innovación desde ese lado, ver qué es lo que va a pasar y qué van a hacer las empresas con eso”.
“Nosotros vendemos autos asique vamos a seguir apostando por autos premium”, enfatizaba el ejecutivo. “Vamos a seguir apostando por la tecnología, la planta motriz de autos eléctricos, la conectividad para que nos subamos al auto y sea parte de nosotros ¿Qué es lo que viene? La conducción autónoma, esto es lo que viene dentro de muchos años. Eso ya es una realidad, técnicamente ya es posible. Hoy las discusiones son casi filosóficas: qué reglamentación tenemos que tener, quién es el culpable, si el auto, el individuo, la fábrica. Esas son las discusiones que están hoy, pero no la parte técnica. Los autos van a ser módulos autónomos que vamos a poder elegir si manejarlos o no. Audi presentó recientemente un concept que es real, existe, se puede probar y todo. Se llama Grandsphere y es un vehículo de gran porte que tiene una conexión autónoma de grado 4 que es el máximo nivel de autonomía que hay en un auto, y además uno lo puede manejar. Es caro, sí, es muy caro, pero toda esta tecnología algún día va a estar en las manos de todos”, proyectaba Wittstatt.
Para finalizar, Jebsen reflexionaba: “Es un ejemplo muy claro de qué es lo que quiere el consumidor, después las empresas lo adaptan y después los gobiernos dicen si se puede manejar o no. Al final es ese el camino, todavía se está discutiendo si legalmente se puede manejar y, si sufrís un accidente, qué pasa con el accidente. Es eso, el consumidor es el que decide lo que quiere, las empresas nos tenemos que adaptar y después está la legislación, los gobiernos o lo que sea”.